Autor: Isaac Belmar
Nacionalidad: España
Ediciones
Irreverentes, 2014
124 páginas.
Precio: 12 euros
ebook: 0,99 €
Perdimos
la luz de los viejos días es una pequeña novela en cuanto a
cantidad (poco más de 100 páginas), pero no en cuanto a calidad: Es una de mis
mejores lecturas de este año. Esta historia lleva pululando en mi cabeza desde
que la terminé hace meses. La reseña aguardaba, a medio hacer, desde entonces:
No encontraba el tono ni las palabras para expresar cuánto me había gustado.
Aún no las he encontrado, pero ha llegado la hora de compartir esta historia en
mi blog, para que descubráis la novela y no os perdáis esta joya.
Argumento
Ella
se marchó, así empiezan las historias que merecen contarse.
Se
marchó de la mano de la enfermedad dejando solo a un hombre pequeño, al que no
le queda nada excepto vengarse de la vida que se la arrebató. O al menos, de
los que la hicieron sufrir a ella.
Pero
ese hombre pequeño nunca se vengó de nadie, ni levantó la voz, ni mangó nada
cuando era crío. Así que busca a quienes sí son capaces de hacerlo, a un
extraño Papa que reina en un agujero de la ciudad llamado las Cien Puertas, con
sus secuaces tatuados y llenos de pendientes de oro.
También
encontrará en ese camino a un extraño asesor, que le guía en todos los pasos de
su contrato de venganza.
Y como
siempre en su vida, las cosas no salen bien. Ella empieza a aparecerse en
sueños y él va perdiendo la cordura. Además, algo raro le ha sucedido al mundo,
ha perdido la luz que tenía. Así que ese hombre pequeño tendrá que averiguar
qué pasa en realidad, mientras intenta escapar de sus tratos con el diablo.
Mi opinión
La historia comienza con nuestro
protagonista contándonos la pérdida de la mujer de su vida, Miriam. “Primero me la quitó un gilipollas y ahora,
para siempre, un maldito cáncer de encías. No sabía ni que eso existía, joder”.
Nuestro protagonista tenía muchos sueños,
pero nunca llegó a materializarlos. Es una persona gris, anodina, llena de
miedos e inseguridades, que no ha hecho nada con su vida, sólo se ha dejado
arrastrar por ella. “Nunca he sido un optimista,
soy demasiado miedoso para eso, así que tuve que construirme un coraje de
mentiras”.
Al dolor que siente por la muerte de
Miriam se le suma la rabia, rabia porque ella, la mejor persona que había
conocido, muriese, y su exnovio, una mala persona que le hizo sufrir, siguiera
viviendo. No considera que eso sea justo, y piensa que debe hacer algo para que
el exnovio sufra como se merece. Y como él no tiene la fuerza ni los recursos
para llevar a cabo esa venganza, decide contratar a alguien para que lo haga
por él.
El
autor nos va introduciendo no sólo en su cabeza y en sus sentimientos, si no en
ese mundo que una vez fue como el nuestro, pero que cambió cuando una roca
espacial bautizada Maat chocó contra nuestro planeta.
Pensaron que iba a destruir la Tierra, pero al final resultó estar compuesta
por un material desconocido y se desintegró en la atmósfera: “Desde entonces la luz de nuestros días es
extraña, pues ese material desconocido y raro debió reaccionar con la atmósfera
y la cambió. Ahora todo parece una película vieja, y un poco sucia y de colores
más ocres, los de un atardecer que no se acaba”.
Antes del fin del mundo que al final no lo
fue surgió una nueva religión, cuyos miembros se llamaban maatianos. Decían que
esa roca era un castigo de Dios por nuestros pecados. Como la humanidad
sobrevivió “ahora dicen que el meteoro
realmente se estrelló, que en realidad todos estamos muertos y atrapados en un
infierno y no en la vida que llevábamos, por es la luz extraña de los días”.
Hay
autores que con pocas palabras transmiten mucho. Isaac Belmar es una de ellos.
Enseguida nos sumerge en ese mundo y en la vida del protagonista.
Sientes su dolor, su rabia, su mediocridad, sus ansias de venganza. Es un
hombre que no tiene nada, ni esperanzas de tener algo alguna vez. Y quien no tiene
nada que perder y sólo un objetivo en mente (la venganza), puede volverse muy
peligroso. Se va metiendo en una espiral en la que cada vez va desciendo un
peldaño más, hacia la oscuridad.
Se podría considerar que el libro es de
ciencia ficción, ya que se desarrolla en un futuro en un mundo distinto al
nuestro. Pero Isaac Belmar nos mete tan rápidamente en ese mundo, que nos
parecerá el nuestro, o como sería el nuestro si un meteorito chocara contra él.
En pocas páginas, te envuelve la
atmósfera que crea el autor, y sientes que conoces ese mundo de toda la vida.
No sé cómo explicarlo, simplemente, el autor te traslada allí de una forma magistral, nos presenta al
protagonista, y nos va contando lo que siente, lo que hace para calmar la rabia
que le consume y dejar de sentir ese dolor sordo que le acompaña, y cómo los
acontecimientos se van precipitando hacia un final brutal, descarnado, genial.
Como decía al principio, no sé cómo
transmitir cuánto me ha gustado este libro. La historia me ha parecido muy original. El protagonista,
extraordinario. Y la narración brillante, con pocas palabras nos transmite mucho.
Perdimos la luz de los viejos días es
una historia diferente, muy entretenida, y que a su vez invita a la reflexión. Un libro magnífico que recomiendo sin duda.
Una pequeña joya que os invito a descubrir, y sobre la que tengo ganas de
comentar con aquellos que ya lo hayan hecho.
* Ayer el ebook estaba en Amazon a sólo 0,99 €, si te ha llamado la atención y decides dar una oportunidad al libro (cosa que yo te recomiendo) corre aquí a ver si sigue a ese precio. Si no, estará a 3,50 € (es decir, hazte con él sí o sí, que la historia merece la pena).
Que bonito título. Me la anoto.
ResponderEliminarEs el mes de los autoplublicados, con lo que seguramente ewte a 0,99 € todo el mes. Me has llamado la atención sobre esge libro, por lo que como además es cortito, seguro que lo leo.
ResponderEliminarPues me has convencido chica. Vaya reseña más bonita y además un libro tan corto y tan bueno no es para pensárselo mucho.
ResponderEliminarBesos
Leo los artículos de Isaac y a veces comentamos en Twitter, me parece un escritor con una fuerte personalidad y la capacidad de elegir bien sus palabras (como tú dices, sabes decir mucho con muy poco). No sabía que tenía esta novela, me la llevo. Bss
ResponderEliminarA mí también me gustó mucho, por eso he comprado ya la próxima novela de Isaac,y eso que todavía no está publicada. Estoy deseando leerla. Me ha gustado mucho tu reseña. Biquiños!
ResponderEliminarNo lo conocía, pero con tu reseña y siendo tan cortito creo que lo debería tener en cuenta.
ResponderEliminar¡Un beso!
Pues con tu reseña y por su extensión... me la anoto!
ResponderEliminarUn beso
Me gustan estas historias porque generalmente sus reflexiones y descripciones son oro puro que retener pero también si estas de bajona estos episodios desarrollados en lugares con poca luz me agobian algo
ResponderEliminarMe gustan estas historias porque generalmente sus reflexiones y descripciones son oro puro que retener pero también si estas de bajona estos episodios desarrollados en lugares con poca luz me agobian algo
ResponderEliminarMe lo llevo apuntado :)
ResponderEliminarParece una historia preciosa pero he leído no hace mucho una que tenía el mismo tono y de momento, dejo este en el aire. Besos.
ResponderEliminarNo sé, no lo tengo claro. Tendré que darlo una vuelta. Besos.
ResponderEliminarPor lo que cuentas parece un buen libro, así que lo tendré en cuenta
ResponderEliminara ver qué tal
un beesito
Pues no pinta mal =)
ResponderEliminarBesotes
No me sonaba de nada. Y desde luego con tu reseña logras convencerme.
ResponderEliminarBesotes!!
Solo el título ya me ha llamado poderosamente la atención, pero es que después de esta reseña como para no anotarlo.
ResponderEliminarBesos.
Al final, y luego me mataré a mí misma. Me he hecho con él. Con una reseña así, cualquiera se resiste !!
ResponderEliminarBesos
Pues me llama la atención y, además, veo que está en papel, me lo anoto.
ResponderEliminarbsos!
Lo leí el año pasado y me encantó. La manera de escribir, de meternos en la historia, la ambientación... Me sumo a tu recomendación
ResponderEliminarBesos
Me ha sorprendido... NO tiene mala pinta eh!!!! No lo descarto.
ResponderEliminarbesotes.
No lo descarto, aunque no sé si me gustaría esa mezcla del argumento principal con ciencia ficción. Un besote!
ResponderEliminar